CEOE Teruel y CEPYME Teruel presentan el avance del estudio sobre necesidades de empleo en la provincia de Teruel de 2023. El informe recoge que el desequilibrio se cifra en la necesidad de contratar a más de 4.000 trabajadores. Esta situación es el resultado de una combinación de factores que incluyen el relevo generacional, la expansión de negocios y la rotación de personal.
El estudio calcula que el 74% de las empresas turolenses planean realizar incorporaciones en el próximo año, con independencia de su posición geográfica (rural-urbana) y del tamaño de la empresa. Algunos sectores clave como la hostelería y el turismo son quienes mayor capacidad de contratación están mostrando. Le siguen servicios profesionales e industria.
Los perfiles más demandados continúan siendo los de cualificación media-alta (52,1%), le siguen empleos que requieren una formación media-baja (32,3%), que, pese a los esfuerzos de digitalización y automatización de procesos, siguen teniendo una destacada importancia. Por último, los perfiles de cualificación alta, que requieren titulaciones superiores, son los menos demandados (15,6%). Este resultado refleja la sobrecualificación de trabajadores y la creación de pocos empleos de gran especialización y alto valor añadido, consecuencia del tamaño y la especialización del tejido empresarial español.
La inmovilidad geográfica, los horarios laborales que implican turnos, trabajo nocturno o festivos, y la insuficiencia en las retribuciones salariales son las principales barreras a la contratación que destacan los empresarios. El informe también revela que el 70% de las empresas han llevado a cabo entrevistas de selección en el último año, pero un 26% no han tenido éxito en la mitad de los procesos de selección.
Según el tejido empresarial turolense entrevistado, los trabajadores valoran especialmente una jornada laboral continua y evitar la nocturnidad o los festivos.
Como respuesta a estas barreras, las empresas turolenses están tomando medidas para mejorar la contratación y retención de talento. Estas acciones incluyen la incorporación de planes de igualdad, iniciativas para favorecer la conciliación de la vida laboral y familiar, así como la implementación de estrategias empresariales orientadas a la retención de talento en su comarca. Además, el empleo es uno de los motores para hacer frente a la despoblación, por lo que es necesario adoptar medidas para superar estas barreras.
Medidas y recomendaciones para afrontar esta situación
El estudio recoge una serie de medidas y recomendaciones para hacer frente a esta situación laboral, donde la más importante es la necesidad de maximizar las ayudas al funcionamiento.
Otra de las medidas para paliar la falta de mano de obra es la contratación de contingentes de trabajadores extranjeros. El estudio apunta que es importante establecer políticas de migración y empleo que faciliten la incorporación de trabajadores extranjeros, garantizando sus derechos y bienestar.
El estudio propone abordar el problema del relevo generacional de manera proactiva, invirtiendo en la creación de empleo, programas de educación y formación adaptados a las necesidades locales en oficios con cada vez menos jóvenes formados.
También propone la inversión en formación como una de las medidas para paliar este escenario. Los resultados de la encuesta determinan que existe un desajuste entre la oferta y la demanda debido a la falta de cualificación. Es por ello que es necesario apostar por la Formación Profesional Dual (FP Dual). Esta modalidad educativa ofrece una oportunidad única para alinear las habilidades de los estudiantes con las demandas del mercado laboral local.
El informe apunta que es necesario proteger las micropymes del territorio, puesto que muchas de ellas prevén crecer durante 2024, tanto económicamente como en número de trabajadores. Por este motivo, señala que apoyar a estas pequeñas empresas a través de incentivos y acceso a financiación debe impulsar la contratación de nuevo personal.
Otra de las medidas es la colaboración entre las empresas y las instituciones públicas, como el Instituto Aragonés de Empleo (INAEM). Esto implica la puesta en marcha de programas de formación y recualificación para mejorar las habilidades de la fuerza laboral local, así como la promoción de oportunidades laborales y la colaboración con empresas locales para fomentar la creación de empleo. También cabe señalar la importancia de retener el talento joven de la provincia.